EL RADICALISMO EN CRISIS
Consecuencia de la aplicación de los principios del radicalismo, consagrados en la Constitución de Rionegro: Se fortalecieron los grupos regionales de terratenientes y comerciantes a quienes el Estado solicitaba préstamos a fin de solucionar su caótica situación económica.
A la
crisis económica se sumó el descrédito del Gobierno Central y la caída de las
ventas del tabaco a partir de 1876.
Para las elecciones de 1876, el liberalismo estaba ya dividido en dos grandes
grupos: los radicales que deseaban que se mantuviera la Constitución
y los moderados que, junto con los conservadores, defendían un cambio
hacia el centralismo. Pese a la división, Aquileo Parra fue elegido para la
presidencia. Parra, el último presidente radical, tuvo que enfrentar la
sublevación de los conservadores de Tolima y de Antioquia.
En 1878, los liberales moderados y los conservadores apoyaron la candidatura
de Julián Trujillo quien, una vez elegido, abolió las leyes anticlericales
e inició negociaciones para poner fin a la separación entre la Iglesia y el
Estado. El Congreso, conformado en su mayoría por liberales radicales se
opuso a estas medidas.
El gobierno de Trujillo abrió el camino a la Regeneración, un movimiento político cuyo objetivo era la restauración política y económica del país, el restablecimiento de la paz y el fortalecimiento de las instituciones y del poder del Estado. A la cabeza de este movimiento estaba Rafael Núñez, quien contaba con el apoyo de los liberales moderados y de los conservadores.
Núñez fue elegido
presidente en 1880. Durante su primer gobierno, que se extendió hasta 1882,
dictó leyes que agradaron a los conservadores, tales como el restablecimiento
de los estudios de religión abolidos durante el período radical, y la
autorización a los obispos desterrados para regresar al país. Para el
siguiente período fue elegido Javier Zaldúa quien falleció y fue sucedido por
José Eusebio Otálora. Durante su gobierno retornaron al país los jesuitas, que
habían sido expulsados por Mosquera al iniciarse el período radical.
Con estos últimos gobiernos la caída del radicalismo era ya evidente. En 1884,
Núñez fue reelegido e inició su proyecto de derogar la Constitución de Rionegro
y redactar una nueva Constitución de carácter.
Los radicales y caudillos regionales se opusieron a este
proyecto y declararon la guerra a Núñez en 1885. El conflicto se inició en
Santander y se extendió a otros estados. Apoyado por los
conservadores y los liberales moderados que se unieron en el Partido Nacional,
Núñez pudo vencer a los sublevados y declarar la nulidad de la Constitución de
Rionegro.
ACTIVIDAD
1-Analizar y
explicar que se produjo la crisis del radicalismo